Durante lo que queda de septiembre y parte de octubre, estaré contando cuentos al caer la tarde.
El sitio es inmejorable: una de esas «cuevas» que hay por montones debajo de Lavapiés, que por ser lo que son tienen una temperatura perfecta. Contamos a las 20:00, para salir a la hora perfecta para cenar.
Para cenar cena, porque de cuentos ya te irás cenado, tras elegir de entre nuestro menú lo que más te apetezca oír… habrá cuentos artesanos, hechos en casa con mucho mimo, así como cuentos de productores locales e incluso algunos importados, que para eso la chef se encarga de buscar en el mercado cada día lo que esté más fresco, según la temporada.