Me encanta contar cuentos con trastos. Llamo cariñosamente «Trastos» a mis personajes tridimensionales, o sea a los que elaboro artesanalmente a propósito para cada cuento.
Un día, mis personajes más famosos se sublevaron. Cami, Libardo y Josefina me armaron la gorda porque decían que no se les veía en redes sociales tanto como a mí. Y claro, como vi que tenían razón, me puse en la tarea y me dediqué a presentarlos en sociedad. A ellos y a los demás trastos. Mira, mira:
Eso parece que consiguió calmarlos…
Pero yo ya estaba envalentonada, así que hice otro vídeo, pero de vídeos, no de fotos. Se llama «Los trastos cuentan». Aquí está:
Así que aprovecho y te cuento. Llevo a mis trastos a contar conmigo a mucho sitios. Unas veces van unos, otras veces van otros. No te dejes engañar, parecen infantiles, pero también les encanta acompañarme a las contadas para público adulto.
Si te das un paseo por nuestro canal de YouTube, verás de lo que te hablo.
También están en Facebook, por supuesto, y en Instagram. Y en twitter.
¡Que cualquiera les aguanta otra pataleta!